Un día sin apenas darse cuenta, pues ella, "Alma de Luz", no creía en la maldad y su inocencia era tal, tardo bastante en percatarse de alguna cosas que sucedían.
Alma de Luz comienza a ser victima de celos, envidias y tantas cosas más, siendo esto largo de relatar y no es necesario.
Por parte de las "Almas enfermas y negativas" que caminaban en la oscuridad, no soportando la "intensa luz" que desprendía "Alma de Luz".
Poco a poco comenzaron a sucederle cosas a "Alma de Luz". Ella no aceptaba que fueran ataques de "Almas negativas". No creía en esas cosas, siempre rechazó existieran Almas tan malignas.
Alma de Luz comenzo a pensar que era ella la causante, sus actos no eran correctos, quizás estaba haciendo todo mal, por ello le sucedieron tantos descalabros.
Poco a poco, con ayuda de Dios, aunque ella todavía no lo sabía, Alma de Luz fué sintiendo y pensando, dándose cuenta que las cosa sucedian en determinados momentos y con determinadas Almas.
Comenzó a prestar atención, sintiendo que aquello era real. Alma de Luz no era la causante, eran las "lamas enfermas y negativas" las causantes de todos los descalabros en su vida.
Alma de Luz comienza a despertar a Dios, aunque ella seguía sin saberlo, estaba a su lado para ayudarla. Sentía una fuerte presencia consigo, siempre que las "Almas enfermas y negativas le enviaban algún mal.
Su poder y fortaleza para luchar crecían inmensamente. Alma de Luz sentí procedían de un ser superior, sintiéndolo cada vez más cercano en los momentos de dificultad.
Fue de este modo como Alma de Luz comenzó a sentir y a conectar con Dios. Al Dios que había rezado, temido, adorado, amado y en algunas ocasiones rechazado, como le habían enseñado falsamente.
Un Dios al que Alma de Luz nunca pudo sentir y mucho menos escuchar, hasta este preciso momento. Alma de Luz comienza a vivir una etapa en su vida difícil para ella, pero en la seguridad de estar haciendo lo correcto. Así lo sentía...
Continuara....
María Jesús García Presa
Gran Maestra y Sanadora del Sistema de Sanación Tinerfe